Южная Осетия
Comentarios del Subdirector del Departamento de Prensa e Información del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Maria Zajarova en relación con las manifestaciones de los representantes occidentales sobre la situación en las fronteras de Georgia con Osetia del Sur y Abjasia
Dirigimos la atención hacia una serie de declaraciones que se han escuchado en Occidente (el Secretario General de la OTAN, el Portavoz del Alto Representante de la Unión Europea, el portavoz adjunto del Departamento de Estado de EE.UU.) con acusaciones falsas dirigidas a Rusia en relación con las medidas que se están adoptando para crear las fronteras de Osetia del Sur y Abjasia con Georgia, por parte de las autoridades de estas repúblicas con el apoyo de nuestras guardias fronterizas.
Es necesario volver a repetir lo mismo que la parte rusa, así como nuestros socios de Abjasia y Osetia del Sur, han aclarado muchas veces.
La República de Osetia del Sur y la República de Abjasia son Estados independientes que tienen pleno derecho a ejercer un control sobre su territorio con los recursos que ellos consideren necesarios. Las cuestiones relativas al paso y régimen de la frontera son competencia de Tsjinval y Sujum exclusivamente. En correspondencia con los compromisos internacionales de la Federación de Rusia, nuestra guardia fronteriza realiza únicamente lo que les han encomendado Osetia del Sur y Abjasia, según el acuerdo bilateral del año 2009 sobre un esfuerzo conjunto para proteger la frontera.
Nos gustaría señalar que las medidas de Osetia del Sur de instalar unas vallas fronterizas están dirigidas ante todo a poner fin a la cantidad de incidentes relacionados con el traspaso de la frontera no intencionado por las personas que viven a ambos partes, y eliminar de paso un factor que provoca una tensión constante en la zona fronteriza. Existe el dato de que, desde que se instaló la valla, ha disminuido notablemente la cantidad de incidentes semejantes. Es algo que lo puede corroborar también la Misión de Observación Civil de la Unión Europea en Georgia.
Desgraciadamente, en Occidente como siempre prefieren hacer oídos sordos a estos argumentos y ni siquiera tratan de entender la situación. Por otra parte, en honor a la verdad, hemos de señalar que los autores de tales declaraciones se han abstenido de multiplicar deliberadamente las falsas afirmaciones del presunto traspaso de la línea fronteriza en el interior de Georgia.
Si nuestros socios occidentales están realmente preocupados sobre la cuestión del fortalecimiento de la estabilidad y la situación de la población en las regiones de la zona fronteriza, tienen que dejar de insistir con la retahíla de la integridad territorial de Georgia y no seguir culpando de todos los pecados a Rusia. En lugar de eso, basta con señalar a Tbilisi el camino correcto: un diálogo respetuoso y constructivo con Tsjinval y Sujum.
4 de octubre de 2013