Declaración del MAE de Rusia en relación con el ataque de misiles asestado por los neonazis ucranianos contra Donetsk
El régimen kievita neonazi apoyado por EEUU y sus satélites volvió a perpetrar un bárbaro ataque terrorista contra la población civil de Rusia.
En la mañana del pasado 21 de enero, las unidades armadas de seguidores de Bandera dispararon malintencionadamente con lanzamisiles múltiples contra el mercado y tiendas en el barrio Tekstílschik del distrito Kírovski de Donetsk. En total, cometieron seis ataques de artillería deliberadamente contra lugares concurridos. Hay muchas víctimas. Según los datos que recibimos, no menos de 25 personas murieron y 20 fueron heridas.
El Comité de Instrucción de Rusia se puso a investigar este delito sin demora. Todos los implicados y responsables por este y otros atentados terroristas en nuestro territorio serán inevitablemente castigados.
Se estableció que el fuego procedía de Avdéevka todavía controlada por las FF.AA. ucranianas y se aplicaron las armas suministradas por Occidente. Todo ello vuelve a corroborar su explícita involucramiento en el conflicto y lo hace implicado en las acciones delictivas del régimen de Zelenski. Éste último demostró una vez más su actitud inhumana y odio hacia las personas completamente inocentes. Los líderes kievitas los califican de “especies” y están dispuestos a matarlos sin piedad.
La parte rusa vitupera este pérfido golpe contra la población civil. La insaciable ansia de Occidente de infligir una “derrota estratégica” a Rusia mediante los títeres ucranianos, a los que quiere respaldar irreflexiva e infinitamente, empuja al régimen kievita a hacer pasos cada vez más imprudentes, incluidos ataques de terrorismo, violaciones masivas del derecho humanitario internacional y crímenes de guerra. Rusia insta a todos los Gobiernos responsables y las estructuras de referencia internacionales a que denuncien decisivamente esta cruel embestida. Su silencio significará que avalan tácitamente los asesinatos de civiles y estimulará a los neonazis ucranianos a cometer malhechos aún más sangrientos.
Los ataques terroristas del régimen kievita evidencian ilustrativamente la falta de voluntad política para facilitar la paz y arreglar el conflicto por vía negociada.
Es obvia la necesidad de lograr todos los objetivos de la operación especial militar. No deberían provenir del territorio ucraniano las amenazas a la seguridad y efectuarse atentados terroristas.