Die UNO
Comentario del Departamento de Información y Prensa del MAE de Rusia en relación con la aprobación por el Consejo de Seguridad de la ONU de la resolución 2375 concerniente al problema nuclear en la Península de Corea
El 11 de septiembre, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad de votos la resolución 2375 que refleja la actitud negativa de la comunidad internacional hacia el ensayo nuclear efectuado el pasado 3 de septiembre por la RPDC y constituye una respuesta lógica a la burda violación por Pyongyang de las decisiones anteriores aprobadas por el Consejo de Seguridad de la ONU.
Durante una intensa labor para consensuar el texto de la resolución junto con nuestros socios chinos hemos logrado rectificar el original anteproyecto estadounidense sumamente rígido y encaminado, en esencia, a asfixiar la economía norcoreana y preñado de catastróficas consecuencias humanitarias para la población de la RPDC. Gracias a ello, hemos asegurado la sucesiva ejecución del mayor proyecto ruso-norcoreano en materia de tránsito de carbón Khasan−Rajin, mantener la comunicación aérea directa entre ambos países. Se han dejado sin efecto las demandas de decretar sanciones contra los máximos dirigentes de la RPDC, del Gobierno y del Partido del Trabajo de Corea, así como de embargar todos los suministros de petróleo y sus derivados a la RPDC. Han sido atenuadas y adecuadas a las normas del Derecho Internacional las cláusulas relativas a la inspección de buques sospechosos en alta mar. Ha sido anulada la exigencia de deportación forzada de migrantes laborales norcoreanos.
El texto de la resolución contiene un importante planteamiento político relativo a la inadmisibilidad de expansión del conflicto y a la apremiante necesidad de arreglar por vía política y diplomática los problemas que encara la Península de Corea.
Partimos de que las sanciones decretadas contra la RPDC buscan el único objetivo de obligar a sus autoridades a dejar de practicar ensayos de misiles y cargas nucleares, prohibidos por resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Exhortamos a todos los Estados miembros de la ONU a cumplir estrictamente la resolución 2375 en peno volumen en aras de normalizar la situación en torno a la Península de Corea. Nos referimos en primer término a la aspiración, refrendada en el documento, a arreglar la situación mediante el diálogo, por vía política y diplomática, a la necesidad de intensificar los esfuerzos para relajar la tirantez en la Península de Corea y en torno a la misma.
La Federación de Rusia se pronuncia consecuentemente por el más pronto inicio del proceso negociador y desarrolla una enérgica labor con las partes concernidas para encontrar soluciones recíprocamente admisibles de solución integral de los problemas que afronta la Península de Corea, también a base de la Hoja de Ruta de arreglo, adelantada por Rusia y China.