Discurso y respuestas a preguntas de los medios ofrecidas por el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en el curso de una rueda de prensa conjunta al término de las negociaciones con el Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, Sochi, 14 de mayo de 2019
Estimadas damas y caballeros,
Ante todo, quisiera saludar de nuevo al Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, en Rusia. Es su primera visita a Rusia en calidad de jefe del departamento diplomático de EEUU, aunque estuvo aquí cuando ocupaba otros cargos.
Hemos sostenido hoy las negociaciones a continuación de la conversación telefónica de nuestros Presidentes que tuvo lugar el pasado 3 de mayo y duró una hora y medio. A su término, los jefes de Estado nos encargaron a intensificar nuestro diálogo.
Comenzamos a cumplir esta tarea hace varios días en Finlandia, en Rovaniemi, donde al margen del Consejo Ártico sostuvimos una reunión muy útil. Hoy, a continuación de aquel diálogo, hemos abordado la situación en que se encuentran nuestros asuntos bilaterales y hemos intercambiado opiniones sobre los asuntos más acuciantes de la agenda internacional y regional, ante todo, sobre la situación en Venezuela, en la península de Corea, en Siria y en la región de Oriente Próximo y el Norte de África, en general, en Ucrania, en Afganistán, sobre la situación en torno al Plan de Acción Integral Conjunto para el arreglo del programa nuclear iraní (PAIC).
Informaremos esta tarde al Presidente de Rusia, Vladímir Putin, sobre los resultados de nuestras negociaciones.
En general, puedo decir que la conversación ha sido sincera y útil.
Está claro que nuestras relaciones con EEUU dejan mucho que desear. Las capacidades para la cooperación mutuamente ventajosa no se han realizado en muchos ámbitos. Esto se debe en mucho a la política sancionatoria antirrusa que las actuales autoridades de EEUU heredaron de sus predecesores.
Como se trata de las dos mayores potencias nucleares, la tensión entre Rusia y EEUU inevitablemente ejerce una influencia negativa en la situación global. Así las cosas, hemos coincidido con Mike Pompeo en que es necesario emprender esfuerzos concretos para mejorar la coyuntura actual.
Rusia está interesada en normalizar nuestro diálogo. Estamos convencidos de que es posible y realizable en caso de actuar en un espíritu de respeto mutuo y tomando en consideración los intereses recíprocos.
Hemos convenido en que es importante restablecer los canales de comunicación suspendidos últimamente, en particular, en gran medida debido a una ola de acusaciones infundadas dirigidas contra nosotros de los intentos de ejercer la influencia en los resultados de las elecciones en EEUU, hasta de un complot entre nosotros y altos cargos de la actual administración estadounidense. Está claro que estas insinuaciones son falsas. Espero que tras el informe del fiscal especial Robert Muller, publicado hace poco, se calmen las pasiones al otro lado del océano y se pueda avanzar hacia el establecimiento de una interacción más constructiva y un diálogo profesional entre Rusia y EEUU. Creo que para esto existen entendimientos básicos discutidos por nuestros Presidentes durante su reunión celebrada en la cumbre en Helsinki el año pasado y posteriormente varias veces en sus conversaciones telefónicas. Mientras, actualmente estos entendimientos no se realizan plenamente.
En cuanto a los resultados positivos, hemos destacado la reanudación en diciembre del año pasado de nuestro diálogo bilateral sobre la lucha contra el terrorismo a nivel de jefes adjuntos de los departamentos diplomáticos. Es un paso positivo, pero no es suficiente.
Esperamos conseguir realizar también otras iniciativas abordadas en Helsinki y por nosotros en Rovaniemi, hace poco, y hoy en Sochi.
Ante todo, quisiera destacar que sería oportuno formar un consejo no gubernamental de expertos que consista de politólogos conocidos, exmilitares, diplomáticos, expertos en relaciones bilaterales. Manifestando su opinión desde fuera podrían ayudarnos a entender cómo es posible superar la desconfianza mutua acumulada, ante todo, para interpretar correctamente las acciones de cada parte en el sector de defensa, para prevenir la carrera armamentista y para establecer en un futuro la cooperación normal y sostenible en otras áreas.
Consideramos que sería eficaz asimismo formar un consejo empresarial bilateral que una a los representantes del sector de negocios de ambas partes. Ellos podrían también elaborar recomendaciones dirigidos a ayudar a los Gobiernos a establecer las condiciones confortables para la cooperación económica mutuamente ventajosa.
Hemos abordado las acciones capaces de dar impulso al desarrollo positivo de las relaciones ruso-estadounidenses. Hemos entregado un documento de posición al Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo. Espero que nuestras ideas se estudien en Washington.
En lo que se refiere a la agenda internacional, hemos hablado abiertamente sobre muchos asuntos, incluida la situación en Venezuela. Rusia considera que el pueblo de este país debe determinar su futuro. En este contexto es importante que todas las fuerzas patrióticas y políticas responsables de este país entablen el diálogo entre sí, a lo que exhortan varios países de la región en el marco del llamado Mecanismo de Montevideo. Según el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el Gobierno está dispuesto a entablar tal diálogo.
En cuanto a Siria, hemos hablado sobre la necesidad de cumplir lo estipulado en la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU cuya disposición clave es el respeto a la soberanía y la integridad territorial de Siria. Hemos convenido en continuar las consultas de conformidad con los contactos que tenemos. Hemos confrontado las posturas en relación con varios aspectos concretos, incluidos los vinculados con la erradicación definitiva del terrorismo en Siria, la creación de las condiciones para el regreso de los refugiados, la solución de los problemas humanitarios y el lanzamiento del proceso político en el contexto de formación del Comité Constitucional. Esperamos que este órgano pueda empezar a trabajar próximamente en Ginebra bajo los auspicios de la ONU.
Hemos hablado sobre Oriente Próximo, sobre la situación en torno al PAIC. Tenemos muchas discrepancias al respecto, pero el hecho que abordamos este tema y continuaremos discutiendo esta situación nos da la esperanza de que se pueda llegar a unos acuerdos con apoyo de Rusia y EEUU.
En lo que se refiere a la situación en Ucrania, existe una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que aprobó los Acuerdos de Minsk. Esperamos que las nuevas autoridades de Ucrania puedan formular su postura al respecto partiendo de que el arreglo político de la crisis en Ucrania no tiene alternativa.
En cuanto a otros asuntos, quisiera mencionar la situación en la península de Corea abordada por nuestros Presidentes en su conversación telefónica del pasado 3 de mayo. El Presidente de Rusia, Vladímir Putin, contó al Presidente de EEUU, Donald Trump, sobre la cumbre entre Rusia y Corea del Norte celebrada el pasado 25 de abril en la ciudad de Vladivostok. Nos pronunciamos por la profundización del diálogo entre Washington y Pionyang. Estamos dispuestos a apoyarlo. Estoy seguro de que, al final, tenemos que aplicar esfuerzos para formar en el Noreste de Asia un firme mecanismo de paz y estabilidad. Hemos destacado que los dirigentes de Corea del Norte esperan las respectivas garantías de seguridad de su país en respuesta a los pasos para la desnuclearización. Está claro que la desnuclearización debe abarcar toda la Península de Corea.
Hemos destacado una interacción muy eficaz que se lleva a cabo en relación con Afganistán, en particular, en el formato de los tres países: Rusia, EEUU y China.
Hemos prestado una atención especial a la estabilidad estratégica. Hemos abordado la situación en torno al Tratado de Eliminación de Misiles de Alcance Medio y Más Corto (INF, por sus siglas en inglés). Hemos hablado sobre las perspectivas del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas Ofensivas (START III) en vista de que el primer plazo de su vigencia expira en febrero de 2021. Estamos interesados en reanudar el diálogo profesional y concreto sobre todos los aspectos de control sobre las armas. Espero que nuestros dos pueblos y toda la comunidad internacional perciban positivamente este acuerdo.
En general, quisiera destacar de nuevo que la conversación ha sido sincera, sustancial y significativa. Espero que la visita del Secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, contribuya no sólo a mejorar las relaciones ruso-estadounidenses sino también permita a avanzar quizás con paso lento pero real hacia la solución de los problemas regionales e internacionales pendientes en la agenda de las relaciones bilaterales.
Agradezco a mi colega por las negociaciones eficaces.
Pregunta: Usted ha mencionado el Tratado START III que expira en 2021. No está claro todavía si se prorroga seguramente. Si EEUU no disipa las preocupaciones de la parte rusa ¿insistirá Moscú en la prórroga del Tratado?
Respuesta: En cuanto a nuestra postura, sí que tenemos las preocupaciones en relación con el reequipamiento de las lanzaderas de submarinos Trident y bombarderos estratégicos a una configuración no nuclear anunciado por EEUU. El Tratado prevé los procedimientos concretos que deben permitir a la otra parte a convencerse de que es imposible el retorno de estas lanzaderas y bombarderos a una configuración nuclear. Estas cuestiones se discuten en el marco de la Comisión consultiva bilateral sobre el Tratado START que observa su cumplimiento. Esperamos que esta discusión conlleve un resultado final positivo.
Prefiero dejar sin respuesta la pregunta sobre las acciones de Rusia en caso de que estas preocupaciones queden, porque ahora partimos de que podremos llegar a un acuerdo en el marco de la mencionada Comisión bilateral. No es la tarea de los diplomáticos hacer conjeturas. Nuestra tarea es conseguir resultados. Actuaremos de esta manera.
Pregunta (traducción del inglés): ¿Por qué el Gobierno ruso insiste en su apoyo a Nicolás Maduro aunque todos los países democráticos del mundo latinoamericano reconocieron a Juan Guaidó como jefe interino legítimo de Venezuela?
Respuesta: En lo que se refiere a la postura de Rusia en apoyo del diálogo, la discusión de todas las cuestiones por los propios venezolanos sin ultimátums y condiciones previas, partimos de que la democracia no se establece con el uso de la fuerza. Las amenazas contra el Gobierno de Nicolás Maduro provenientes de los representantes oficiales de la Administración estadounidense y de Juan Guaidó que constantemente recuerda su derecho a invitar a la intervención armada desde el exterior, no tienen nada que ver con la democracia.
Recordamos que en mayo de 2003 el entonces Presidente de EEUU, George W. Bush, declaró el establecimiento de la democracia en Irak a bordo de un portaaviones. Recordamos que en 2011 se anunció que el líder de Libia, Muamar Gadafi, se había derrocado y la democracia se había establecido en el país. Creo que no tengo que detallar más cómo están las cosas con la democracia en Irak, Libia y en otros sitios donde los intentos similares de derrocar regímenes tuvieron lugar y no conllevaron nada bueno.
Pregunta: Se divulga una información contradictoria sobre una posible reunión personal del Presidente ruso, Vladímir Putin, y el Presidente de EEUU, Donald Trump. Por ejemplo, se menciona a Osaka como un posible sitio de su celebración. ¿Podría usted aclarar si tal reunión se celebra? Si es así, ¿cuándo y dónde se celebrará?
Respuesta: Naturalmente, hemos oído la declaración del Presidente de EEUU, Donald Trump, de que espera celebrar una reunión con el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, en particular, en el marco de su participación en la cumbre del G20 en Osaka. Si recibimos oficialmente tal propuesta, reaccionaremos positivamente a ésta. Hemos hablado con Mike Pompeo de esto hoy.
Pregunta (traducción del inglés): Usted ha dicho que, a pesar de las discrepancias que existen, es posible conseguir varios acuerdos en relación con Irán. ¿Podría usted aclarar qué hay en común con EEUU en relación con Irán y cómo puede desarrollarse la situación?
Respuesta: En cuanto a la situación en torno a Irán y el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), espero que el sentido común prevalezca y los rumores sobre los supuestos planes de enviar a 120.000 militares estadounidenses a la región sean infundadas (de lo que hemos hablado hoy y Mike Pompeo ha dicho que es asunto de los militares), porque el grado de tensión en la región está elevado sin esto debido a varios conflictos. A propósito, quisiera destacar que hemos hablado también sobre las perspectivas de arreglo palestino-israelí.
Cuando digo que esperamos encontrar una solución política de la situación en torno a Irán, realmente aplicaremos esfuerzos para que el estado de las cosas no devenga en un guión militar. Conseguirlo es la tarea de los diplomáticos.
He sentido que la parte estadounidense está dispuesta a buscar una solución política también. La situación es complicada. Como se sabe, no hemos apoyado la decisión de EEUU de abandonar el PAIC y la consideramos errónea. El Gobierno estadounidense adopta nuevas medidas contra Irán imponiendo sanciones que prohíben realizar negocios con Irán: no se puede comprar el petróleo ni mantener relaciones comerciales con Irán, en general. Espero buscar las vías de salida de esta crisis junto con nuestros colegas europeos y socios chinos que son partes del PAIC también y en contacto con Washington. Mientras, actualmente se nos empuja cada vez más profundamente a esta espiral descendente.
En cuanto a la cuestión dirigida al Secretario de Estado de EEUU sobre las declaraciones sobre la injerencia de Rusia en las elecciones en EEUU, quisiera decir que he entregado hoy a Mike Pompeo una copia del artículo publicado en EEUU en 1987 con la advertencia de que la Unión Soviética intentaría ejercer la influencia en las elecciones del Presidente de EEUU que se celebrarían en 1988. En aquel artículo se mencionó por primera vez sobre las ambiciones políticas del entonces empresario exitoso, Donald Trump.
Se puede discutir este tema infinitamente, pero hasta que no se presenten las pruebas concretas no podremos abordarlo en serio. Los hechos ponen de relieve que los que están por detrás de estos rumores no tienen pruebas. Hemos propuesto en reiteradas ocasiones a reanudar contactos en relación con la seguridad cibernética en el marco de que se podrá discutir cualesquiera otras preocupaciones que tenga una parte en relación con la otra. Una gran parte de ataques contra nuestros recursos de Internet se libran contra las fuentes que se encuentran en EEUU. Así las cosas, hay lo que discutir.
En cuanto a la última campaña presidencial en EEUU, a partir de 2013, existe un canal de intercambio de la información sobre posibles riesgos accidentales que surgen en el espacio cibernético. Desde octubre de 2016 (cuando la administración democrática de EEUU planteó por primera vez este asunto) hasta enero de 2017 (hasta la investidura de Donald Trump) este canal se usó para recibir preguntas y dar respuestas. Hace poco, cuando las acusaciones contra Rusia de la supuesta injerencia en las elecciones alcanzaron su apogeo propusimos publicar este intercambio de mensajes entre los dos organismos que se ocupaban de evitar incidentes en el espacio cibernético. Mike Pompeo lo ha recordado hoy. La Administración ya de Donald Trump renunció a hacerlo. No sé quién ha tomado la decisión, pero la parte estadounidense prohibió la publicación de estos datos, aunque, según nosotros, en caso de que esta información se publicase, no habría una gran parte de insinuaciones divulgadas ahora. No publicaremos unilateralmente estas negociaciones, pero quiero centrar la atención en este hecho.
Confirmo de nuevo que queremos y estamos dispuestos a ocuparnos de manera profesional junto con nuestros socios estadounidenses de los problemas que surgen en el espacio cibernético, sin emociones, la politización, intentos de ideologizar o presentar este tema como el más importante en la lucha política en EEUU.
He entregado a Mike Pompeo un memorándum no oficial, como se suele decir en inglés, "non-paper" en que se presentan las confirmaciones reales de la injerencia de EEUU en la política interna de Rusia, incluida la conocida ley "Sobre el apoyo de las libertades de Ucrania" aprobada por el Congreso en que se le obliga al Secretario de Estado a promover la democracia en Rusia directamente y a través de las organizaciones no gubernamentales de Rusia. Se destinan 20 millones de dólares anualmente para estos fines. No son fantasías sino es un documento que tiene estatus de ley de EEUU. Así las cosas, estamos dispuestos a abordar este tema.
Aquí está el respetado Embajador de EEUU, Jon Huntsman, quien sabe cómo difícil puede ser el trabajo en Rusia. Nuestro Embajador en EEUU, Antoli Antónov, sabe de los problemas que surgen también. Nos pronunciamos por resolver estas cuestiones, eliminar todas las pilas de acciones negativas recíprocas iniciadas por EEUU a que tuvimos que responder y porque los diplomáticos trabajen abiertamente, a tenor de las convenciones de Viena sobre relaciones diplomáticas y consulares sin hacer pensar a la contraparte que alguien intenta ejercer la influencia en los procesos políticos.
Hemos citado hoy un nuevo ejemplo cuando en 1933, por iniciativa de EEUU, el Presidente Franklin Roosevelt y el Comisario del Pueblo para Asuntos Exteriores de la URSS, Maxim Litvínov, intercambiaron notas en que asumieron el compromiso de no injerirse en los procesos políticos internos de la otra parte. Subrayo de nuevo que EEUU incentivó este intercambio de notas. Durante varios años, a partir de la Administración de Barack Obama, proponemos a nuestros socios estadounidenses a confirmar de nuevo este acuerdo. No están listos a hacerlo todavía. Sacad las conclusiones.